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Nueva traición de la administración Obama a Israel en un momento en que Irán está haciendo todo para tener armas nucleares, Obama les «echa un cabo» desclasificando documentos secretos sobre cómo Israel se dotó de armas nucleares:: 107 páginas de documentos clasificados alto secreto procedentes de los servicios de inteligencia y la diplomacia estadounidenses de 1.969 acaban de ser desclasificados a petición de la Casa Blanca.
Los documentos sugieren que Israel tiene armas nucleares, y que Estados Unidos eran muy hostiles a la idea de que Israel introdujese el armamento nuclear en el Oriente Medio, por temor a una carrera armamentista que dañaría sus intereses en la región
Varios caminos se preveían para disuadir a Israel de seguir adelante con sus proyectos nucleares, incluyendo el chantaje: el Departamento de Estado estadounidense planeó suspender la entrega de los F-4 Phantom II con capacidad para transportar un misil con cabeza nuclear y otros armamentos, en caso de rechazo israelí y que prosiguiera con su programa de misiles Dassault MD-620.
Los estadounidenses tenían ya una visión distorsionada del mundo árabe porque creían que la «psique» de este último consideraba que la paz sería posible sólo cuando fuesen capaces de discutir con la misma fuerza con Israel. El armamento nuclear en manos israelíes hacia temer a los Estados Unidos que cualquier acuerdo de paz se vería dañado. Además, pensaban mucho en sus intereses en la región, y temían que los árabes se volviesen hacia Rusia, ya para equiparse o para ponerse bajo su protección.
También temían verse obligados por sus aliados, entre ellos Jordania, a entregarle armas de tecnología avanzada para que mantuviesen el mismo nivel con el armamento que proporcionaría Rusia a los países de la Unión Árabe (Egipto y Siria).
Si Israel se negaba a firmar el Tratado de No Proliferación, pensaban, podría servir de pretexto para que los países fuera de la región, como el Japón, la India y Australia, así como los de Oriente Medio, tampoco lo firmasen.
Por último, los funcionarios norteamericanos no creían en el contexto de Oriente Medio, en el poder disuasivo de las armas nucleares, debido a «el elemento irracional de las decisiones árabes», y el hecho de que la energía nuclear no puede responder a los ataques de comandos o terroristas suicidas.
Pero, señaló el Departamento de Estado, «cualquier intento de promover el embargo de armas favorecería entre los israelíes las condiciones psicológicas y militares para equiparse a la mayor brevedad posible con las armas sofisticadas que queremos precisamente evitar. Por otra parte, negar a Israel el armamento que necesita para hacer frente a la amenaza constante de los árabes y los ataques de comandos sería muy difícil de justificar «.
En la página 7 del documento desclasificado del Departamento de Estado destinado Henry Kissinger de 29 de mayo 1969 se puede leer:
« «Para su estrategia de disuasión, Israel considera que debe tener una fuerza nuclear, a la que generalmente se considera invulnerable, es decir, tener capacidad para un segundo ataque. Israel ahora está construyendo esa fuerza – los silos de cohetes Jericó.»
Los Estados Unidos, por lo tanto, querían imponer condiciones a Israel en preparación de la reunión entre Golda Meir y Richard Nixon:
1 Una primera reunión con el embajador Rabin haría llegar el mensaje a Israel: (a) la seriedad con la que vemos el desarrollo del programa nuclear y de misiles de Israel, y (b) transmitir nuestras peticiones específicas de que Israel detenga ciertas actividades y nos dé garantías en este sentido.
2 Las garantias que pedimos a Israel son:
(A) la promesa hecha en privado (con el derecho a inspeccionar) de que Israel cesará y se compromete a no desarrollar o adquirir armas nucleares y misiles estratégicos, y (b) una garantía pública en la forma de su firma y ratificación del Tratado de No Proliferación.
3 Debemos repetir, en nombre de nuestra administración, que la definición para los estadounidenses de la «Introducción» [de las armas nucleares] significa que Israel no poseerá físicamente armas nucleares, incluidos los componentes explosivos de un arma nuclear.
4 Rabin debe ser contactado por el Presidente o el Secretario de Estado de Defensa. Aunque las conversaciones con Israel serán particularmente difíciles, lo serán menos si nuestras peticiones de garantías se hacen inequívocamente y al más alto nivel del Estado.
Israel no accedió a ninguna de esas peticiones.
Según la ley estadounidense, por lo tanto, la venta de tecnología nuclear a Israel está prohibida porque Israel no es signatario del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP).
Así, en 2012, una primera serie de documentos desclasificados del FBI,que incluian una investigación de 1985-2002, llegó a la conclusión de que el actual primer ministro, Benjamin Netanyahu estuvo involucrado en la compra ilegal de componentes (activadores Krypton) y tecnología americana para el programa nuclear israelí, mientras trabajaba para una compañía israelí, Heli Trading Company.
Netanyahu estaba en contacto con Richard Kelly Smith, presidente de una compañía de California llamada Milco, que fabricaba chips para la NASA.
Milchan–Peres–Netanyahu
Netanyahu, según los documentos desclasificados, recibió ayuda del super-productor Hollywood Arnon Milchan (Mr. & Mrs. Smith, Fight Club, LA Confidential …), de nacionalidad israelí del que se sospecha, aunque nunca se probó , trabajó para la defensa israelí.
En mayo de 1985, sospechoso de vender el Ministerio israelí de Defensa unos disparadores 850 Krypton que podrían detonar un arma nuclear (cuando se reveló la información, Israel afirmó que el Krypton era para productos farmacéuticos) Smith fue arrestado por la policía de Los Ángeles. Pagó una fianza de 100.000 dólares pendientes de juicio por exportación ilegal de equipos utilizados para el desarrollo de armas nucleares. Pero él y su esposa desaparecieron durante la noche, probablemente a bordo de su yate, dejando atrás su casa de California, estimada en medio millón de dólares.
El FBI emitió una orden de arresto internacional en 1992, y Smith fue descubierto y arrestado en junio de 2001 en Málaga, España, y extraditado a los Estados Unidos. Tenía entonces 71 años.
Durante la investigación sobre sus actividades, las autoridades estadounidenses descubrieron que también había vendido componentes a Taiwán, que al igual que Israel no ha firmado el TNP.
La investigación del FBI, dicen los documentos, lleva a Arnón Milchin, Hailey propietario de la empresa que servía como intermediaria entre Milco y el Ministerio de Defensa israelí. Entre 1973 y 1985, el 80% de las ventas de Milco eran a Israel, lo que hace creer que Milco era una tapadera para las compras del Ministerio israelí en los EE.UU.
© Jean-Patrick Grumberg pour Dreuz.info.
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