

Su trabajo es esencial para la búsqueda de pistas en los lugares donde ocurrieron ataques terroristas. Se dedican a examinar cada centímetro del terreno donde se encuentran para detectar los mínimos cambios. La misión del Batallón Beduino de Reconocimiento: encontrar rastros para descifrar quienes son los culpables.
Últimamente, están ocurriendo con más frecuencia incidentes en Judea y Samaria en los cuales se arrojan piedras, bombas molotov, apuñalamientos, tiroteos y neumáticos con trampas explosivas. En la Brigada Samaria, hay un grupo de soldados beduinos, conocidos como los rastreadores, que ayudan con la búsqueda de los culpables. Los beduinos son pastores nómades, criados en bosques y desiertos. Es así como desarrollan durante la infancia la intuición de rastreo, algo que ellos le llaman sentido.
El Sgto. Mayor Salaj Sabuad, es un rastreador beduino que lleva más de 23 años en el ejército, nos cuenta su experiencia. “Nosotros somos soldados normales como todos los otros de la infantería. Formamos parte de cada evento que sucede en nuestro terreno,” explicó Sabuad.

Sabuad explica que los beduinos aprenden la habilidad de rastrear por su experiencia como pastores. Al ocuparse de los rebaños, lentamente ellos van desarrollando los sentidos del olfato, vista y oído. Sabuad continua, “Este trabajo enseña a reconocer la naturaleza y buscar las señales que se encuentran escondidas en ella.”
Los rastreadores de las FDI conocen el terreno que cuidan; cada piedra, árbol, esquina y rio y les lleva de varios meses familiarizarse con los alrededores. Si algo se encuentra fuera de lugar, el rastreador se dará cuenta.

El trabajo de un rastreador se basa en seguir las señales que dejan los sospechosos. Mirando las huellas, Sabuad puede descifrar la edad del terrorista, su altura, la dirección de sus pasos, si el sospechoso corría o caminaba, que tipo de zapatos tenía puesto y si es que había una valla, saber en que dirección el sospechoso fue.
Sabuad explica que un rastreador no se puede sustituir. Los robot y las computadoras pueden hacer estallar una bomba y tomar fotografías, pero no pueden descifrar la dirección de donde vino la bomba o , quién la trajo y los datos del terrorista que la colocó.

El Sgto. Mayor Salaj Sabuad y el resto de los rastreadores seguirán utilizando su intuición y habilidades para encontrar a los culpables de los ataques terroristas en Judea y Smaria.
