De las lágrimas a las risas, lo que el terrorismo antisionista no puede vencer.

Hace dos semanas tuvo que posponerse la boda de Sarah-Tehiya Litman.

Habia un motivo de peso para hacerlo.

Su padre y su hermano fueron asesinados por el terrorismo antisionista.

Pero hay cosas que el terrorismo no puede vencer.

Hoy Sarah ha celebrado su boda, y es posible que esta boda si pueda ser denominada la «boda del año», quizas del siglo.

Con esta boda estos jovenes israelies derrotan de forma inapelable al terrorismo «palestino», al odio antisionista, al prejuicio y la violencia israelifoba.

Lo que ayer eran lagrimas hoy es felicidad, y contra eso no pueden hacer nada los terroristas.

Fuente: Arutzheva