Malmö la ciudad sueca sacudida por ataques con granadas

Goran Mansson asesora a la población sobre cómo actuar si encuentran una granada sin explotar.
Los países escandinavos tienen fama de pacíficos y prósperos. Pero en la tercera ciudad de Suecia, Malmö, la tranquilidad de sus cerca de 300.000 habitantes se ve perturbada por una oleada de ataques violentos con explosivos.
POR: Antía Castedo
Solo en los dos últimos meses hubo al menos una decena de incidentes graves, entre explosiones de granadas de mano, bombas colocadas en autos y un tiroteo.
Dos personas resultaron heridas en este verano de violencia y los incidentes superan la veintena en lo que va de año.
El pasado domingo, una granada de mano explotó en una calle residencial cerca de una estación de autobuses y causó daños en los edificios cercanos.
Un hombre que vive en la zona oyó un fuerte ruido.
«Los niños se despertaron y empezaron a llorar. Abrí la ventana de la cocina y sentí un olor a quemado», explicó al diario local «Sydvenskan».
«Es horrible, da miedo. Sobre todo cuando tienes niños, no sabes dónde van a golpear», dijo.
Dos muertos en un ataque en una tienda de Ikea en Suecia

El ataque ocurrió en Vasteras a una hora de Estocolmo el 10 de Agosto.
Dos personas murieron y otra resultó gravemente herida en un ataque con cuchillo en una tienda de Ikea en Vasteras, Suecia. La policía informó en una declaración que las víctimas son un hombre y una mujer. Un sujeto fue arrestado por sospecha de asesinato.
Un portavoz de Ikea confirmó el incidente e indicó que el centro Erikslund, donde se ubica la tienda, permanece cerrado. Vasteras está ubicada a casi una hora al occidente de la capital Estocolmo. Testigos dijeron a medios locales que varias ambulancias llegaron al lugar de los hechos y el área fue acordonada por la policía.

El domingo 26 de julio explosionó una granada en un estacionamiento.
La policía cree que no hay un patrón común a todos los ataques, que la comisaria policía municipal, Pernilla Nilsson, califica de «crueles». «Las razones pueden ir desde los celos sentimentales a la venganza o a asuntos de drogas», le explicó Nilsson por teléfono a BBC Mundo. El objetivo último parece ser la intimidación: «Mostrar a tus amigos o enemigos criminales lo que eres capaz de hacer». Detrás de los ataques hay miembros de bandas y redes criminales.
Nilsson y sus colegas tienen identificadas a 15 personas, de las cuales dos fueron arrestadas. Al resto los están buscando.
«Submundo» criminal
La violencia de las últimas semanas sacó a la luz un problema que no es nuevo en Malmö, bautizada por algunos medios como «la pequeña Chicago» por la criminalidad. Un asesino en serie sembró el pánico en la ciudad entre diciembre 2009 y octubre de 2010.
El lado oscuro del paraíso escandinavo
Peter Mangs fue condenado a cadena perpetua por tres asesinatos y 12 intentos de asesinato, casi todos contra inmigrantes.
¿Es Escandinavia el mejor lugar para vivir en el mundo?
Las estadísticas parecen decir que sí: Pero, ¿y si no lo fuera? ¿Y si aquel lugar idílico donde todos sus habitantes disfrutan del mayor nivel de vida en el mundo esconde en realidad secretos que nadie quiere escuchar? Y estos secretos son los que pretende sacar a la luz el autor británico Michael Booth en un artículo que tituló «Tierras oscuras: la triste verdad tras el mito escandinavo» Booth intenta desmontar el mito a fuerza de cifras y unas ganas de despojar a la opinión pública de sus prejuicios, aunque estos sean positivos. Y, a juzgar por la respuesta, parece que lo consiguió.

La mayor parte de los ataques sucedieron de noche.
En la ciudad, conectada por puentes con la capital danesa (Copenhague), opera desde hace tiempo un «submundo» de redes criminales y bandas que se dedican al tráfico de drogas y a otras actividades ilegales.
«Son hombres jóvenes, unos 30 muy duros y otros 250 que no están conectados con la sociedad, sin formación ni empleo», le explica a BBC Mundo Joakim Palmkvist, periodista de sucesos de «Sydvenskan» y autor de un libro sobre la mafia.
Las bandas operan desde hace décadas. «El líder de la más importante es un serbio que llegó a Malmö cuando era muy pequeño», dice Palmkvist.
La ciudad recibió una gran cantidad de refugiados de los Balcanes en la década de los 90 y más recientemente, población afgana y de Medio Oriente.
En la actualidad, un tercio de su población es inmigrante. De ellos, una tercera parte están desempleados, según publicó la agencia Reuters.
Pero Palmkvist se apresura a desvincular el problema de la violencia con cualquier cuestión de orígenes.
Los delincuentes que protagonizan estas últimas oledas de violencia «llegaron cuando eran niños y se hicieron criminales aquí», dice. [NT. Goal: Vaya parece que no lo haceís muy bien entonces ¿Convertís en criminales a los «refugiados»?…pssss que mal no?].
Las granadas de mano utilizadas en los recientes ataques fueron fabricadas en países de la ex-Yugoslavia. «Son baratas y es muy fácil hacerse con ellas», reconoce la policía Nilsson. A la policía de Malmö no sólo le preocupan las granadas que explotan.

Malmö es la tercera ciudad de Suecia.
También se han encontrado en las calles artefactos que no llegaron a explotar y que suponen un peligro añadido para los vecinos. Goran Mansson, jefe de la unidad de explosivos de la Policía, asesora a la población sobre qué hacer si encuentran una de estas granadas sin explotar en la calle o en un parque.
«Es raro hacer casi lo mismo en Malmö que lo que hacía antes en Irak», le dijo a Reuters Mansson, quien trabajó con bombas y minas en la ex-Yugoslavia, Líbano e Irak.
Pobreza y desempleo
Manne Gerell, criminólogo de la Universidad de Malmö, prefiere hablar de «redes de criminales débilmente asociadas» en lugar de bandas muy organizadas. A las épocas de más violencia les suceden épocas más tranquilas. Gerell cree que hay una relación entre la criminalidad de Malmö y la pobreza que afecta a una parte de sus habitantes. «La mayoría de incidentes se producen en barrios desfavorecidos», le dice a BBC Mundo.

Un asesino en serie sembró el pánico en la ciudad entre diciembre 2009 y octubre de 2010.
El problema de la pobreza se concentra sobre todo en cuatro vecindarios en los que abunda el desempleo y la desconfianza hacia el sistema. Pero no todo el mundo comparte esta visión. Simone Scarpa, investigador italiano de la Universidad de Lineo que estudia la segregación urbana de Malmö, cree que la ciudad no es tan distinta del resto de Suecia.
«Mi perspectiva no es muy ortodoxa. La visión que se tiene desde fuera de Suecia, como un país muy pacífico, no responde a la realidad», le dice a BBC Mundo.
«En el resto del país también hay crímenes y la tasa de homicidios es bastante alta».
«Terror»
Sin embargo, Palmskvist cree que los vecinos están «bastante» afectados por los incidentes. «Aunque esto no es extremismo, para mí es una forma de terror», afirma. «La gente tiene miedo. Es un nivel de violencia desconocido en Europa occidental». El jefe de la policía sueca anunció que destinará a varios centenares de policías para reforzar la presencia en Malmö, tras recibir críticas por la escasez de efectivos en la ciudad debido a las vacaciones de verano. A pesar de todo, la comisaria Nilsson confía en que la policía acabará arrestando a todos los responsables. «Necesitamos ayuda del resto de Suecia y mostrar que eso no es aceptable. La gente debe sentirse orgullosa de pertenecer a esta bonita ciudad».

