«A pocos minutos de la carretera que une Jerusalén con el Mar Muerto, el Monasterio de San Jorge surge en medio de un espectacular desierto bíblico, donde los monjes cristianos mantienen su antiguo modo de vida.
El Monasterio de San Jorge surgió en el siglo IV con algunos monjes que buscaban las mismas experiencias que Juan el Bautista y Jesús en el desierto,, y se establecieron en torno a una cueva donde se cree que Elías fue alimentado por cuervos (1 Reyes 17:5-6) .
El complejo del siglo VI cuelga del precipicio, con su antigua capilla y jardines. Está habitado por monjes ortodoxos griegos. Se llega por un puente peatonal a través del cañón del río Kelt, y que muchos imaginan se trata del Valle de la Sombra , Salmos 23, y donde los pastores todavía cuidan a sus rebaños tal y como se describe en Ezequiel 34 y Juan 10:1-16.
El valle es paralelo a la antigua calzada romana que iba hasta Jericó y telón de fondo de la parábola del Buen Samaritano (Lucas 10:29-37).»
Fuente: Goisrael.es