“Saif al-Islam y yo tenemos amigos en común en Austria y mucho antes de todo el lío en Libia les pedí que hablaran con él sobre Gilad Shalit porque los Kaddafi son cercanos a (el líder de Hamas en el exilio, Khaled) Mashaal”, explicó.
“Hace un mes -prosiguió el funcionario druso- se acordó de mí y les dijo que le diría a Mashaal que libere a Shalit, firme un acuerdo con Israel e incluso dé un discurso en Jerusalem, como (el ex presidente egipcio Anwar) Sadat.”
“Les respondí que estaría dispuesto a hablar con él para ayudar a Gilad y Saif al-Islam consideró que ello aliviaría la presión europea y de la OTAN sobre Libia”, añadió Kara, quien poco después recibió otro mensaje que le indicaba que se había arreglado una reunión en Libia entre Saif al-Islam Kaddafi, él y el político judeoaustríaco David Lazar.
Sin embargo, las autoridades israelíes le negaron el permiso para viajar a Libia por razones de seguridad.
“Lazar me dijo que Saif al-Islam dijo que nos traería a Gilad y me pidió que no hablara sobre el acuerdo hasta que fuera autorizado por (Muammar) Gaddafi”, relató el viceministro israelí, quien contestó que “llevaría el pacto al gobierno para que decida qué hacer”, pero “desde entonces, la situación en Libia ha cambiado y ya no es relevante”.
“Si hubiese sabido que Gilad Shalit sería liberado, habría pagado cualquier precio (porque) no me interesa la situación interna en Libia, sólo quiero traer a casa” al joven secuestrado en territorio israelí por terroristas palestinos en 2006, admitió Kara.
El tema fue informado originariamente por el diario londinense en árabe Asharq Al-Awsat, en un artículo que citó extensamente al viceministro israelí, pero éste desmintió haber sido su fuente.
“No sé cómo salió la historia”, aseguró Kara.