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En una sesión informativa especial a los corresponsales extranjeros este Viernes, 24 de enero, un oficial de inteligencia israelí de alto rango, que habló bajo condición de anonimato, informó que más de 30.000 combatientes de Al-Qaeda están activos en Siria, un enorme aumento de los 2.000 yihadistas que estaban presente allí hace dos años. Con los yihadistas en el control del territorio sirio en las fronteras del norte de Israel, el oficial de alto rango dijo que «muchas discusiones se llevan a cabo a puerta cerrada sobre la posibilidad de repensar su estrategia» acerca de la neutralidad en la guerra civil de Siria.
La conclusión deducida de esta revelación es que, por primera vez en tres años del conflicto civil de Siria, Israel está dispuesto a emprender una acción militar transfronteriza para frenar esta amenaza directa.
En su exposición, el funcionario israelí destacó que los grupos rebeldes islámicos que amasan Siria abiertamente han amenazado con poner sus ojos en Israel después de derrocar a Assad.
Luego pasó a informar de que otros 1.200 combatientes afiliados a Al Qaeda han tomado una presencia en la Gaza gobernada por Hamas. Por otra parte, la coordinación se ha profundizado entre las ramas de Al Qaeda en Siria y el Sinaí egipcio, donde sus partidarios salafistas locales han formado una coalición yihadista autodenominada Ansar Beit al Maqdis (el Frente de Jerusalén).
Este frente llevó a cabo cuatro ataques terroristas en El Cairo este Viernes, matando a por lo menos 6 personas e hirió a más de 60. Se exhibió por primera vez una capacidad para ataques terroristas coordinados dentro de la capital egipcia.
La semana pasada, se dispararon dos misiles Grad desde el Sinai salafista, contra la ciudad israelí de Eilat, tras una serie de ataques contra las fuerzas israelíes y numerosos ataques mortales contra objetivos militares egipcios en el Sinaí.
El ejército israelí nunca antes ha publicado las cifras de la escala del despliegue de Al Qaeda en Siria, o revelado su concentración en la frontera con Israel. La reforma política oficial describió y ofreció la justificación de la posible intervención israelí en Siria con el fin de expulsar la amenaza yihadista de vuelta a sus pueblos y aldeas del norte.
Miles de combatientes extranjeros de todo el mundo musulmán, así como de Europa y América del Norte, han acudido a Siria para reforzar los grupos de al-Qaeda que operan en Siria. Ellos tienen grandes planes para crear un gran Estado islámico independiente en el corazón de Oriente Medio. Esta es la conclusión de los expertos de inteligencia, de acuerdo con fuentes antiterroristas y fuentes militares de Debkafile. Este estado está destinado en primer lugar a devorar grandes extensiones de tierra en Irak y Siria, antes de que sus fundadores vuelvan sus ojos contra Israel y Jordania.
. Sin embargo, si su primer objetivo de derrocar al régimen de Assad se ve frustrado por parte de la alianza ruso-sirio-iraní-Hezbollah, que están dispuestos a invertir este orden e ir directamente a Israel
Cuatro grupos combatientes islamistas radicales están activos en la guerra civil en Siria:
1. Jabhat al-Nusra, también conocido como el Frente Nusra, opera bajo las órdenes directas del mando superior, el líder de Al Qaeda, Ayman al-Zuwahiri.
El Miércoles, 22 de enero, el Shin Bet informó que frustró un complot que había sido urdido por un equipo mixto de yihadistas para llevar a cabo tres operaciones terroristas en Israel. Los Palestinos y los terroristas de Al Qaeda locales que llegaron desde Turquía o Siria y las repúblicas caucásicas rusas iban a volar la Embajada de EE.UU. en Tel Aviv, así como el centro de convenciones y una ruta de autobús en Jerusalén.
Esta divulgación proporcionó los antecedentes para la conferencia que las IDF ofrecieron a los corresponsales extranjeros el viernes.
2. El Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS), que ha capturado grandes áreas del este de Siria, entre ellos algunos de sus campos petroleros, y se apoderaron de los distritos estratégicos del oeste de Irak, incluidas las ciudades de Faluya y Ramadi .
3. Ahram al Sham (Movimiento Islámico de los Hombres Libres de Levante). Aunque menos conocida en Occidente, esta organización ha planteado una fuerza de 15.000 combatientes de Al Qaeda y los diversos movimientos salafistas radicales. Encabeza el Frente Islamista recién formado de siete grupos terroristas anti-Assad.
Aunque este frente se ha separado de Al Qaeda y está financiado y armado por Arabia Saudita, comparte la misma ideología y la dedicación a la destrucción de Israel.
Las relaciones de Ahram Al Sham con Al Qaeda han sido objeto de especulación entre los especialistas de inteligencia estadounidenses e israelíes. La especulación fue enterrada a principios de enero, cuando el líder del grupo Abu Khalid al-Siria admitió por primera vez que él es un miembro de Al Qaeda.
4. Jaish al-Islam (Ejército del Islam). Esta es la mayor fuerza rebelde siria presente en la zona de Damasco, y el grupo favorecido por Riad en la asistencia, a juzgar por el hecho de que, además de los brazos y de los fondos, la inteligencia saudí ha enviado instructores militares paquistaníes para entrenar a sus miembros.
Opciones militares de Israel
Aunque el oficial de las FDI no entró en los planes militares de Israel para hacer frente a la creciente amenaza de Al Qaeda, fuentes militares de Debkafile proyectan algunas opciones.
a) Labrando zonas de amortiguamiento seguras, permanentes o temporales, en el lado de la frontera siria. Esto dependería de la cooperación de las milicias sirias locales dispuestas a librar sus tierras de las incursiones de Al Qaeda.
b) Ataques aéreos y terrestres contra las concentraciones transfronterizas de los yihadistas.
c) Estocadas profundas contra las fuerzas de Alqaeda dentro de Siria e Irak para bloquear sus avances que ponen en peligro el Reino de Jordania.
d) Los asesinatos selectivos de altos mandos de Al Qaeda.
e) Frustrar a las unidades yihadistas en cuanto a querer ampliar sus conquistas de las áreas estratégicas de Siria para su uso como trampolín contra Israel. Un ejemplo es Jebel Druso, cuya población ha conservado la neutralidad y se quedó fuera de la guerra civil siria.
El recurso de Israel a la acción militar en contra de la amenaza yihadista de Siria requeriría aprender tácticas militares de parte de Estados Unidos para combatir a los terroristas en Afganistán y Pakistán. El ejército israelí no tiene ninguna experiencia de este tipo o escala de la guerra. Tendría que volver a escribir su doctrina de la guerra y volver a entrenar fuerzas de comando sustanciales en la preparación de largos años de lucha cuerpo a cuerpo contra el enemigo yihadista.
Israel también tendría que sopesar cuidadosamente los pros y los contras de una campaña militar contra el despliegue sirio de Al Qaeda , teniendo en cuenta que el recurso a una campaña contra Al Qaeda aliviaría la presión sobre el régimen de Assad y sus aliados, Irán y Hezbollah. Esa es una llamada difícil de hacer.
Fuente: Debkafile
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