En una entrevista con lanacion.com, el piquetero habla de sus objetivos políticos y asegura que en la Argentina no prosperan los acuerdos porque "falta capacidad de diálogo", probablemente por capacidad de diálogo este nefasto personaje se refiera a las trompadas, agresiones, tomas de comisarias, cortes de calles y avenidas y toda esa metodología que lo caracteriza. Lo que él llama, "capacidad de diálogo". Abajo un extracto de la entrevista.
-Como dirigente social, ¿qué siente con el aumento de la pobreza?
-No siento que haya más pobres. Hoy estoy muy contento y vuelvo a ver la luz. En el 2001 me levantaba y pensaba ¿será hoy? ¿Será hoy que nos vamos a quedar sin país? Tengo cinco pibes grandes, todos laburan, estudian y pensaba en esas épocas qué país les estamos dejando. Hoy vuelvo a ver un camino, una lucecita de esperanza, eso era la noche, es incomparable.
-¿Por qué con D´Elía es todo blanco o negro?
-Soy un tipo de una gran frontalidad. No tengo los cánones del político medio, no hago doble mensaje. En la calle veo amor y odio. Veo tipos que dicen sos lo más grande que tiene la Argentina o los que me dicen reventado. Todo a 10 metros. Me ha tocado cruzar una calle y una persona se acerca a sacarse una foto y cruzo y otro me grita gordo hijo de puta. Con los grandes pasa. A Evita le pasaba lo mismo, el pueblo la amaba y en Recoleta pintaban viva el cáncer. Las personas con un claro sesgo ideológico generan amores y odios.
-¿Cree que Cobos puede ser presidente?
-En la Argentina, D´Elía puede ser presidente; cualquiera puede serlo.
-¿Le gustaría ser presidente?
-Si, me gustaría ser presidente. Mucha gente me dice, no descarto nada.
-¿Cree que la Argentina está preparada para D´Elía presidente?
-En este país soy un ave rara. Una mezcla de Musetta y de Mimi, no? Por un lado me muevo cómodo en los arrabales, pero ahora estoy invitado al Ronald Reagan Center a dar una charla en Washington. Sé que soy mejor que muchos del montón, que Cobos, que Reutemann, que Carrió, que todos esos que lo que expresan es sólo mediocridad. Fui concejal, diputado, secretario de Estado, consejero de educación, vicepresidente del consejo provincial de educación, me senté en el sillón de Sarmiento varias veces cuando me tocaba presidir el consejo. Me sobra paño.
-¿Qué haría si fuera presidente?
-Lo primero que haría es una reforma constitucional profunda. Está Constitución no sirve absolutamente para nada. Además haría un fuerte reclamo por Malvinas, sin militarizar, pero poniendo las cosas en su lugar.